Crítica
Desde Italia, concretamente desde la ciudad de Bérgamo, llegan VERATRUM, una banda en cuyo estilo mezcla el Death y el Black Metal en una propuesta cargada de agresividad y de furia, que ha tomado forma primero en su demo “Sangue”, y después en su primer álbum de larga duración, “Sentieri dimenticati”, que editaron en 2012 y que durante este año se empezó a distribuir por todo el mundo de la mano de Buil2Kill Records.
En la música de VERATRUM encontramos ritmos endiablados y muy rápidos, junto a riffs muy agresivos y voces guturales verdaderamente salvajes, con la originalidad añadida de que sus temas están escritos en su lengua, en italiano, lo que hace que se trate de un grupo fácilmente reconocible
El disco arranca con “La voce del silencio”, una intro hablada en inglés, un tanto siniestra, ideal para utilizarla para abrir los conciertos, que nos va introduciendo en el carácter oscuro de las composiciones de VERATRUM. Esta intro da paso a “Uomo”, un tema cargado de fuerza salvaje, que desde el principio no nos da tregua. Es una canción furiosa, en la que Haiwas canta con muchísima agresividad sobre un ritmo potentísimo y unos riffs de guitarra que se nos quedan en la cabeza desde el primer momento. Es un tema perfectamente representativo de lo que estos chavales saben hacer, porque resume todas las características que vamos a escuchar en las canciones siguientes.
El siguiente tema es “Lo sventramento dei guardiani della Terra Cava”, una canción que empieza con un riff muy reconocible, para después desarrollarse combinando los ritmos machacones con una agresividad enorme, en un tema de muchísima velocidad. En este tema destacan las guitarras por encima de la voz, pero lo que más llama la atención es la contundente pegada de Sabnok con su batería, que empuja a todo el grupo hacia cotas de caña que pueden resultar incluso sorprendentes. Además, un cambio de ritmo hacia el final del tema introduce unos sonidos diferentes, lo que enriquece la canción.
Con muchísima potencia empieza “I trionfi più grandi”, una canción muy rápida, en la que los punteos de guitarra destacan por encima de todo lo demás, quedando entre los más logrados del disco. Por lo demás, el tema se desarrolla con mucha contundencia, con unos ritmos potentes y reiterativos.
“Ars Goetia” empieza con unos redobles muy contundentes, que dejan claro desde el primer momento que estamos ante una canción de ritmo poderoso. Después, el tema se desarrolla con mucha potencia y velocidad, con Haiwas cantando con mucha rabia por encima de unos riffs de guitarra muy conseguidos. La introducción de unos coros un tanto épicos resulta sorprendente, porque no tiene mucho que ver con lo que hemos escuchado, aunque enriquece mucho el tema. No obstante, lo mejor que tiene es su solo de guitarra, muy logrado y muy pegadizo, y con el que dejan claro que saben hacer mucho más que dar caña.
“I braceri del Tempio di Thot” es un breve tema instrumental, que funciona a modo de interludio. Tiene un inicio muy oscuro, con el que buscan crear una atmósfera densa y opresiva, que nos va atrapando. Sin embargo, muy pronto el tema se va acelerando, con las guitarras acústicas dominando su desarrollo y demostrando la versatilidad y el virtuosismo de estos músicos.
Este tema se une a “Ritorno ad Atlantide”, el tema más largo del disco, que empieza con un punteo de guitarra reiterativo y fácil de escuchar, para después acelerarse con un ritmo muy machacón, sobre el que escuchamos un punteo de guitarra que da paso a la voz de Haiwas, que canta con mucha agresividad sobre un ritmo muy rápido. El estribillo de la canción es perfecto para que el público lo cante en los conciertos, lo que la convierte en una de las canciones que más pueden gustar a los fans del grupo.
“Orizzonte” es otro breve instrumental, un tema tranquilo, en el que el sonido que predomina es el de unas guitarras limpias, aunque también introducen piano y violines, en una combinación sorprendente. Este tema funciona a modo de introducción para “Thule”, una canción que empieza con un tono épico para después acelerarse con un riff muy reconocible y machacón, que da paso a un desarrollo de furia endiablada que no nos da un momento de respiro, con un ritmo contundente sobre el que escuchamos a una voz y unas guitarras que casi parece que compiten para llamar nuestra atención. Se trata de un tema cargado de matices, especialmente en las guitarras, así que tal vez sea uno de los mejores del disco.
El disco termina con “Agarthi”, una canción que también tiene un inicio épico que rápidamente gana velocidad y potencia, desarrollándose con mucha potencia, con un ritmo muy machacón sobre el que escuchamos una voz muy agresiva y unas guitarras que suenan desarrollando unos punteos muy reconocibles. De hecho, lo que más llama la atención de este tema es lo bien introducidos que están los riffs y punteos de la guitarra, que se superponen al ritmo compitiendo con la voz.
En definitiva, VERATRUM demuestran con “Sentieri dimenticati” que son un grupo muy prometedor, con muy buenas ideas que utilizan para crear unas canciones muy trabajadas y cargadas de matices, en las que todo encaja de forma magistral. Además, una producción muy cuidada ayuda a que podamos apreciar todos y cada uno de los matices de estos temas, que son muchos.
No os los perdáis.
VERATRUM son:
Haiwas: Voz y guitarra.
Caim: Guitarra.
Marchosias: Bajo.
Sabnok: Batería.
Track list:
1- La voce del silenzio.
2- Uomo.
3- Lo sventramento dei guardiani della Terra Cava.
4- I trionfi più grandi.
5- Ars Goetia.
6- I braceri del Tempio di Thot.
7- Ritorno ad Atlantide.
8- Orizzonte.
9- Thule.
10- Agarthi.
