TENPEL - EL MÉTODO SILENCIO

Crítica

Si bien el motivo de esta review es la inminente edición física del nuevo EP de TeNPel, “El método silencio”, sería muy irresponsable por mi parte centrarme única y exclusivamente en los cuatro temas que se incluyen en el mismo, sin situar al lector en el universo de este peculiar grupo. Hay bandas que, obsesionadas con la idea de parecer originales a toda costa, caen en canciones que resultan tan artificialmente extravagantes que no hay por dónde cogerlas. No es el caso de TeNPel. Su originalidad es evidente, pero desde mi punto de vista no se trata de un grupo que haga las cosas de cara a la galería, obsesionados por hacer las canciones más retorcidas. Se trata, a mi juicio, de un grupo cuya originalidad es natural.

Si hay dos palabras que van unidas al nombre del grupo, perfectamente podrían ser personalidad y principios. Si bien la situación actual de la música alternativa española está atravesando dificultades desde el punto de vista mercantil (el cual, por suerte, no afecta a la creatividad de los artesanos de canciones) y hay motivos suficientes para quejarse, siempre es esperanzador encontrarnos con grupos como TeNPel, que en lugar de llorar, optan por una opción más saludable: adaptarse a esta situación actual. No hay que olvidar que una de las definiciones de inteligencia dice que ésta consiste en la capacidad del individuo para adaptarse al medio. Y eso TeNPel lo ha hecho a las mil maravillas.

En septiembre de 2006, tras varias maquetas, el grupo ofreció su primer larga duración,“Arete depierta”, totalmente gratis en su página web, en una muestra más que evidente de que dentro del concepto TeNPel hay una forma diferente (no entraré en si es mejor o peor) de entender la distribución musical. Posteriormente el disco salió a la venta a través de Inferno Records, lo cual no quita que esta propuesta sea el lado positivo de la denostada era internet. Tras ello llegó un más que merecido premio: el Festimad. Aunque hay que mencionar también que fueron uno de los claros triunfadores del Universimad y que consiguieron telonear a Lordi. Pese a la juventud de sus miembros, TeNPel es una banda con un recorrido más que considerable.

Es evidente que el talento no siempre es garantía de éxito (concepto muy subjetivo, por otra parte), pero ayuda mucho. Y aquí tenemos un ejemplo de grupo que ha ido creciendo gracias a ese boca a boca impulsado única y exclusivamente por el talento, la paciencia y la creatividad. Un grupo que demuestra que a veces la ambición es sinónimo de querer emocionar a “tan sólo” cien personas (sin necesidad de pillar cómodos atajos) y que la personalidad musical no es incompatible con la flexibilidad y la reformulación de tu propuesta (es muy habitual ver cómo le dan una vuelta de tuerca a sus composiciones). De hecho se podría decir que al escuchar “El método silencio” tuve la sensación de que cada canción podría ser perfectamente de un grupo diferente. Y estoy absolutamente convencido de que esa es una de las virtudes de esta banda (los envidiosos y los cerrrados de mente, sin embargo, pensarán que es una pega). A mi modo de entender, el hecho de que no te puedan encasillar como grupo, es todo un privilegio.

Si bien TeNPel nunca se caracterizó por ser un grupo de single, curiosamente en este trabajo se incluye su tema (“Amanecer en la nave”) más “radiable”. Se trata de una canción preciosa, melancólica (con gran ayuda de los teclados), directa y con una contundencia absoluta, la cual reclama que la intensidad no es patrimonio único y exclusivo de las composiciones más cañeras y apropiadas para hacer pogo.

Le sigue la aflamencada “Notas para ti”, tema que pone de manifiesto que, si se hace con cabeza y buen gusto, no hay géneros musicales incompatibles. El resultado es bastante positivo, sumándose TeNPel a esa larga lista de grupos que han decidido fusionar de una forma elegante sus distintos estilos con el flamenco, tales como Hora Zulu, Los Planetas o Lagartija Nick, entre otros. El tercer corte, “Tenpelodio”, me recuerda en buena parte de los casi cuatro minutos que dura a algunas canciones de Muse (una de mis debilidades musicales), obviando las diferencias entre Belamy y Kantz. Con “Desayuno con Morgan” se llega al punto final de este EP. Sin duda se trata de la canción más potente y rápida, siendo aquí donde Kantz y las guitarras dan rienda suelta a toda su furia de una forma más explícita.

No quiero dejar pasar la ocasión para hablar sobre el increíble poderío de su vocalista, un chico que demostró en Coilbox (participó en el segundo y último disco de la desaparecida banda, “The Havoc”) que es un auténtico portento en su (amplia) parcela, capaz de utilizar su voz como si fuera un instrumento más y dejando con la boca abierta a mucha gente. Siempre pensé que es el cantante perfecto para TeNPel, al igual que TeNPel es el grupo perfecto para él.

Por el bien de la salud musical de la escena nacional espero que la creatividad de estos músicos siga exprimiéndose de una forma tan admirable como hasta ahora. Es muy fácil encontrar grupos que hagan temas que entran rápidamente por una oreja y salen por la otra. Pero a largo plazo, grupos como TeNPel son necesarios para ofrecernos otro tipo de canciones, esas que tardan un poco más en entrar en nuestra cabeza, pero que con cada escucha nos van enamorando más y más. Porque, al fin y al cabo, esas son las canciones que se quedan a vivir dentro de nosotros.Y esas no se van nunca.

Puntuación: 8

Tenpel son:

J.A. Soler (Kantz): voz.
Jorge Iglesias (Koke): guitarra eléctrica y española.
Raúl Mingorance: guitarra eléctrica y acustica.
Juan C. Sanz: batería.
Alex: bajo.
Oscar Martín (Mosz): teclados, sintetizadores y coros.
Puntuación: 8.

Autor: Joaquín Maidagan Goldenzweig

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