BULLET - HIGHWAY PIRATES

Crítica

No está de más decir que el metal sueco lleva unos años a la alza con unas potentísimas bandas que hincan sus raíces en el metal más tradicional, dentro de lo que está siendo un movimiento revival muy a tener en cuenta dentro de unos años, a la hora de pensar en las próximas bandas que ojalá lleguen a mover grandes masas.

En este caso, vamos a hablar de Bullet, banda que si ya sentó unas perfectas bases con su tremendo “Heading For The Top”, logró afianzar un sonido característico (entendiendo el simil existente con bandas como por ejemplo los germanos Accept o los australianos ACDC) con su “Bit The Bullet” y es ahora cuando nos ofrecen diez nuevos temas que bien podían haber sido incluidos en los discos anteriores, aunque este “Highway Pirates” haya crecido a la banda en sonido sin lugar a dudas.

Hablar de Bullet, es hablar de cómo hacer las cosas bien; desde hace tiempo vienen demostrando una gran profesionalidad tanto en las tablas, como debajo de ellas dejando ver claramente una gran actitud que la demuestran por ejemplo en esas portadas tan”macarras” que lucen sus discos especialmente primero y tercero. Siendo este último en el que han utilizado el típico recurso de malotes sobre coche antiguo.

La temática sigue yendo en la tónica de sus predecesores como he mencionado en líneas superiores y aunque no sea una obra maestra ni vaya a revolucionar la escena actual, se hace un disco tremendamente apetecible y muy entretenido.

Si descuartizamos el trabajo como me suele gustar hacer, nos encontramos en primer lugar con el tema que da nombre al plástico; “Highway Pirates”, rápido, atrevido y con esos coros que nos recuerdan composiciones pasadas de la banda y es que la voz del señor Hofer, sigue estando en plena forma. Es un tema de esos para no parar de moverse de principio a fin con afilados riffs y como nota curiosa, leí que un discreto silbido que se escucha en el trascurso de la canción, fue aportado por el legendario Biff Byford de los Saxon.

Nos vuelven a poner en la carretera (con sonido de motocicletas inicial) en ese “Back On The Road”, que se columpia con total seguridad siguiendo una clara idea y tomando ambas guitarras todo el peso de la canción. No debemos subestimar el gran apoyo que recibe el líder de la banda por el resto de sus compañeros a la hora de hablar de segundas voces y es que las partes más animadas de la canción aparecen con la intervención de estos.

Pasamos rápidamente a un tema corto (“Stay Wild”), en la línea del anterior aunque con una presentación algo fuera de lugar que la sacan del directo incluso antes de haber comenzado a pensar en este. La idea está bastante clara aunque bajo mi humilde opinión hubiera explotado mucho más el comienzo del corte para dejar a todos con la boca abierta tal y como terminan haciendo en poco más de los dos minutos restantes, haciendo gala de una gran “agresividad”.

“Blood Run Hot” es una canción en la que bajan el ritmo, aunque mantengan la intensidad muy alto con esa fuerza que transmite toda la banda a una, es impresionante darse cuenta al escuchar varias veces el formato que el combo general de temas resulta tan uniforme, que usen los recursos que usen van a seguir sonando compactos. De hecho en esta canción parece que las guitarras pesan más que las anteriores.

Sirenas, adelantan un raudo “Fire and Dynamite” que será de los claros himnos del nuevo trabajo, haciendo mención de aspectos como “bang your head y metalear sin control”, buenos coros y misteriosas guitarras hacen frente a una canción de larga progresión muy adecuada para poner en contraste con temas pasados de la banda. Además usan ese efecto de “concierto” con falso público que no es desconocido para la banda y da ese toque de calor al corte, que termina por estallar (nada mejor para cerrar un concierto).

“Down and Out” usa los mismos recursos que hemos ido comentando en la mayoría de canciones anteriores; esa batería especialmente marcada que lleva la base rítmica de unas poderosas guitarras mientras que las líneas vocales aparecen impecables entre el apoyo de los coros. Creo que no he hablado mucho de los solos y este tampoco es que sea el mejor del disco aunque le da una vidilla increíble sobre todo a su fin, pensado magistralmente para jalear al público.

De esos cortes impronunciables que por h o por b nos suelen meter ciertas bandas, este “Knuckleduster” es de lo mejor del trabajo por esos avances iniciales que los amantes del género sabrán interpretar perfectamente. Si bien es otra de esas canciones sumamente cortas, en este caso no han necesitado más tiempo puesto que la canción goza de esa clase de ritmo que se mete dentro del cuerpo de principio a fin, en el que todos los instrumentos aportan su toque de genialidad.

Estos chavales van a piñón fijo, sus ideas son bastante claras (mucho más que sus gustos y preferencias) y está claro que la dinamita les mola mucho a juzgar por ese “Heavy Metal Dynamite”, en el que la percusión adquiere un mayor nivel, quizás un tanto injustificado en algunos fragmentos, e incluso podemos escuchar “palmas” que acompañan la energía del tema en algunos fragmentos, de nuevo lo mejor de todo esa fuerza de los coros que suben a Mr Hofer mucho más arriba animando mucho más el cotarro. Fácil estribillo y un solo que paga la misma suerte de este, hacen que sea una canción ideal para todo buen concierto.

Poco va quedando hasta el final, cuando encontramos una canción llamada “Citylights” para nada esperado y sumamente interesante, aunque en mi opinión la voz del señor Hell Hofer no le haga nada de justicia, las guitarras iniciales son simplemente impresionantes creando una atmósfera de carácter rockero que rompe todos los esquemas del resto del álbum. Si hay un punto de la canción que realmente me ha merecido la pena es esa guitarra introductoria dentro del primer minuto hasta que las líneas vocales dan comienzo.

Por otro lado, yo no se que les ha dado a los suecos con la noche, se ve que como ellos gozan de largos días solares les debe molar demasiado el tema, “In The Night” es una canción de cierta forma atmosférica, las guitarras de su introducción no se parecen a nada que nos haya enseñado la banda con anterioridad, aunque esos pegadizos ritmos si que sean más propios de la banda y de lo que a ellos les mola transmitir, me ha gustado mucho el sonido que han sacado a lo largo de toda la composición y esa parte final que no dejará a nadie indiferente.

Es mi obligación decir que tras tres discos de estudio y muchísimos kilómetros de carretera, a estos suecos no les queda demasiado más que demostrar, aunque sí mucho que mantener para no caer de ese pedestal en el que se han subido, haciéndose comparar irremediablemente con bandas arriba ya mencionadas. Mucha actitud y estilo es la que sudan estos chavales a la espera de que el cuarto larga duración pueda ser aún mejor que este, que aunque no muestre una mejora notable compositivamente hablando (ya que sería estúpido negar que no siguen la línea de las dos primeras obras), el salto cualitativo que ha dado su sonido es más que evidente. Bang Your Head chavales y a disfrutar de los suecos.

Puntuación: 8.2

Discográfica: Black Lodge Records

Autor: Javier Fraile

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