JUCIFER + FUCK-USHIMA + ALBINÖ RHINO – ELMUN BAARI, HELSINKI – 19/06/2016
No hay distorsión sin destrucción y caos
Nada mejor que pasar una velada de domingo en la compañía de un grupo de bandas tan pesadas y potentes que resulta muy difícil el poder escuchar tu propio pensamiento. Así nos pasó el pasado domingo en el Elmun Baari de la ciudad de Helsinki cuando presenciamos las actuaciones de JUCIFER, FUCK-USHIMA y ALBINÖ RHINO. A continuación relatamos lo acontecido en aquel ruidoso y distorsionado concierto:
ALBINÖ RHINO
Lamentable no pudimos presenciar la actuación de esta banda de la ciudad de Helsinki que describe su música como pesada/atmosférica/psicodélica. No cometeremos el mismo error la próxima vez.
FUCK-USHIMA
En cambio si pudimos presenciar completamente de la presentación de FUCK-USIMA, cuarteto oriundo de la ciudad de Tampere. La banda compuesta por Lasi (voz), Tatu (guitarra), Matti (bajo) y Tombo von Armageddon (batería) destruyó completamente el pequeño Elmun Baari a base de su metal opresivo. Así la sección rítmica alternaba entre el contundente sludge metal y el acelerado hardcore punk; mientras los riffs metálicos de la guitarras resonaban al mas puro estilo noise y death grind. Y encima de todo esto una voz gutural y raspada similar a la del grupo NAILS.
En resumen, un corto set de 25 minutos, y 10 rápidas y atornillantes canciones interpretadas: «Control», «Buttered Black Demon Shaft», «Sheltered», «Easy», «Contract Killer», «Let’s Kill (the Punk Standard)», «Serve the Spectacle», «Pigs Crawl» y «Brainache». Los FUCK-USHIMA nos pusieron a temblar a base de su intimidante mezcla de power violence, sludge metal y crust punk!
JUCIFER
Posteriormente, tocaba el turno del poderoso duo estadounidense de sludge metal JUCIFER. La banda compuesta por Gazelle Amber Valentine (guitarra y voz) y su esposo Edgar Livengood (batería) descargó toda su ira y rabia desde el primer minutos. Una enorme cortina de amplificadores se acomodaba detrás de Valentine mientras al lado de la batería de Livengood podíamos ver solo un amplificador pero el cual era a su vez potente y ruidoso. Desde el primer tema un muro de sonido distorsionado y denso cubrió toda la sala. La voz extraña y casi gutural de Valentine se mezclaban con la batería cacofónica de Livengood. Temas súper largos llenos de feedback, caos, riffs deformes y tambores aplastantes.
No alcanzan las palabras para describir ese sonido sucio, visceral, lento-ágil, crudo y agudo que fluye a través de esta banda. Interesante esa voz diabólica, agónica y maligna que sale de las cuerdas vocales de Valentine. Y que podemos decir de Livengood, todo un dios detrás de la batería, a la que castiga a base de intensos azotes sincronizados. El público presente -en todo momento muy receptivo y obediente- disfrutó de la actuación del duo estadounidense a plenitud.
En pocos palabras podemos decir que así sonará el mundo cuando llegue el apocalipsis y la destrucción. En resumen, casi una hora de concierto a base de un sludge primitivo y desaliñado. En cuanto a los temas interpretados, algunos se desprendieron de la última producción discográfica del grupo «District of Dystopia» (2014, Nomadic Fortress Records), y el resto de temas -de acuerdo a palabras de la propia banda- se desprendió de una lista mental que ellos mismo construyen antes de cada presentación. Un set sin desperdicio y con un continuo sonido que fluyó entre lo amorfo y lo corrosivo: doom/sludge/death del bueno.